"Es que no deberías seguir así, porque estás perdiendo tu tiempo.. debes dar un ultimátum y cortar por lo sano" :S
Esas sentencias me suenan a dictaduras, yo soy de llegar a consenso. Quizás deba hacer una exepción esta vez y cortar de una vez y por todas. No es sano tener un pololeo a distancia por casi 4 años. Verse, en el mejor de los casos un mes por medio, es demasiado. Relación que tiene delimitado condiciones que no he leído, ni menos, aceptado.
Por otro lado, como dice una jota "los corazones que se quieren, nunca deben despedirse" He pensado que mi flaco es de esas personas que vale la pena esperar. Pero ¿cuánto más?... Lamentablemente, estos asuntos amorosos se rigen por la ilógica sentimental, en vez de la lógica racional que me agrada más. Y es que ya no me alegra verlo. Sus visitas siempre terminan siendo despedidas.
Yo que quiero "darle la vuelta al mundo" (8) de su mano, o si fuera necesio, "rodar a barranca abajo atado a èl".. mientras que èl, ni a misa conmigo. Eso es extraño, sabiendo del mucho amor que èl me tiene, pero también que estoy lejos de ser prioridad en su listado de preferencias. Tabulemos los datos, y las estadísticas darán en mi contra. Mientras que la misma extracción de datos, bajo su interpretación, darán en contra de èl.
Esto se explica porque ambos perdemos, quizás en distintas proporciones y visto por dos distintos cristales. Ambos sentimos la ausencia de despertar y estar solos. De volternos y no encontrar ni siquiera con la vista a su persona querida.
Esas sentencias me suenan a dictaduras, yo soy de llegar a consenso. Quizás deba hacer una exepción esta vez y cortar de una vez y por todas. No es sano tener un pololeo a distancia por casi 4 años. Verse, en el mejor de los casos un mes por medio, es demasiado. Relación que tiene delimitado condiciones que no he leído, ni menos, aceptado.
Por otro lado, como dice una jota "los corazones que se quieren, nunca deben despedirse" He pensado que mi flaco es de esas personas que vale la pena esperar. Pero ¿cuánto más?... Lamentablemente, estos asuntos amorosos se rigen por la ilógica sentimental, en vez de la lógica racional que me agrada más. Y es que ya no me alegra verlo. Sus visitas siempre terminan siendo despedidas.
Yo que quiero "darle la vuelta al mundo" (8) de su mano, o si fuera necesio, "rodar a barranca abajo atado a èl".. mientras que èl, ni a misa conmigo. Eso es extraño, sabiendo del mucho amor que èl me tiene, pero también que estoy lejos de ser prioridad en su listado de preferencias. Tabulemos los datos, y las estadísticas darán en mi contra. Mientras que la misma extracción de datos, bajo su interpretación, darán en contra de èl.
Esto se explica porque ambos perdemos, quizás en distintas proporciones y visto por dos distintos cristales. Ambos sentimos la ausencia de despertar y estar solos. De volternos y no encontrar ni siquiera con la vista a su persona querida.
Temo cargar con el cadáver de una relación agónica. En mi mente resuena metafóricamente la advertencia de mi notebook "Conéctese a la red eléctrica o cambie la batería"
