martes, 17 de mayo de 2011

El perro, la niebla y el sol

Y yo que siempre había sido tan enemiga de la niebla, hoy me pareció menos peligrosa que otras veces. La vi y traté de formar figuras con ella, como tantas veces hice con las nubes, dispuestas ante mis ojos sólo para modelarlas. El invierno en forma de humedad, si me preguntaras ¿Qué es esta estación? tomaría un poco de niebla y diría "esto es".

Si me preguntaran ¿Y él, quién es? les respondería, es niebla. Se puede ver, pero al querer observar un poco más al interior, no se ve nada más que algo borroso. La sensación de frío que desaparece al caminar, adentrándose. La ilusión de falsa compañía, era Unamuno q decía q nadie estaba solo habiendo niebla (si la memoria no me falla) Yo preferiría q me siguiera un perro, con el miedo que me dan, aunque me siguiera por comida, así y todo es más real.

Hoy fue menos peligrosa, porque fui el sol que disipó la niebla. Así es fácil no temer, tomar el toro por las astas como se dice.